(artículo) “El estilo de bracear de Carmen era único”

Valencia

A. PLÀ/ VALENCIA

Carmen Amaya (Barcelona, 1913-Gerona, 1963) ocupa uno de los lugares más destacados en el olimpo del flamenco. Su estilo creó un punto de inflexión en las artes escénicas, y el Ballet Nacional le rinde tributo en La Leyenda , espectáculo que habla de la mujer carnal y de la artista inmortal, del baile fuerte, intenso, rápido y profundamente serio en este mito del flamenco.

“No es una biografía de Carmen, sino mi personal tributo a una de las figuras con más energía y carisma que ha conocido el flamenco”, explicaba José Antonio. “Carmen era un estilo, una forma de bracear que era única, y sólo eso es lo que he reproducido en el espectáculo. Ella, cuando hacía el ‘proceso de escobilla’ podía estar 20 minutos bailando alegrías. Fue la precursora de que la mujer se vistiera de hombre”, declaraba

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