(crítica) Morente&Morente, sociedad efímera

Padre e hija unen por primera vez sus voces en Córdoba en homenaje a la Niña de los Peines

El recital conjunto, una de las grandes apuestas del Festival de Guitarra, se repetirá el día 9 en Pozuelo de Alarcón

TERESA SESÉ - 07/07/2005
Córdoba

En cada nuevo proyecto, Enrique Morente deja tras de sí una estela de admiración y singularidad, de sobriedad y buen gusto, de impecable modernidad. Su hija Estrella no le va a la zaga. Tiene sólo 24 años, una voz rebosante de saber y belleza, y dos discos (Mi cante y un poema y Calle del aire)que han dado la razón a quienes desde tiempo atrás la señalaban como la cantaora del nuevo siglo. ¿Se imaginan qué caminos podrían abrirse para el flamenco si ambos decidieran sumar talentos y personalidades encima de un escenario? Un atisbo de ese hermoso paisaje pudo contemplarse la noche del martes en los Jardines del Alcázar de Córdoba, donde por primera vez padre e hija decidieron unir sus voces para un grandioso pero, ay, efímero espectáculo en homenaje a la Niña de los Peines. Al final, rebasadas ya las dos y media de la madrugada, las más de 3.000 personas que llenaban el recinto estallaron en un aplauso con el que se ponía fin a la que sin duda quedará como una de las grandes apuestas de este Festival de Guitarra de Córdoba.

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