(crítica) Elegancia y honestidad en el espectáculo de Sara Baras

josé martínez

magnífico trío. José Serrano, Sara Baras y Luis Ortega, en el Gran Teatro.
FRANCISCO MARTÍNEZ

Hay que agradecer la sinceridad de Sara Baras al presentar el espectáculo Sabores –en homenaje a su madre Concha– como una puesta en escena en la que el argumento sobra, porque sólo se trata de bailar. Esta honestidad artística se echa en falta porque la mayoría de las veces sólo se quiere rizar el rizo de lo imposible, y lo posible para Sara Baras es el baile asumido como conducta vital en su persona. Así fue como en el Gran Teatro se presentó la artista gaditana, teniendo presente que la elegancia de la puesta en escena es primordial, como el trato y participación con el cuerpo de baile y los bailaores invitados.

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