(entrevista) JUAN HABICHUELA, GUITARRISTA

Juan Habichuela, guitarrista: «La única vez que me acerqué a algo poco puro no me gustó»

El veterano guitarrista, ya retirado y patriarca de una saga emblemática en la que se ha practicado la fusión, considera que el flamenco ha sobrevivido íntegro hasta nuestros días
ANTONIO ROSADO/MÁLAGA

MAESTRO. Juan Habichuela adora reunirse con los amigos de toda Andalucía. /DANIEL APARICI

VIDA Y OBRA
Nombre: Juan Carmona Carmona.
Nacimiento: Nació en Granada en el año 1933.

Trayectoria: Es uno de uno de los mejores guitarristas, aunque empezó cantando y haciendo sus pinitos en el baile, con Paco El Sastre.

Discografía: No grabó hasta el año 1999, con 'Juan Habichuela, de la zambra al Duende'.
Jubilado desde hace menos de un año, lo que en el mundo de los artistas se traduce en una firme decisión de no pisar más un escenario, Juan Habichuela se permite el lujo de viajar ligero de equipaje sólo a aquellos hogares que le hagan sentirse como en casa. En Málaga, ciudad que conoce bien tras pasar diez años de su vida en la barriada de Miraflores, es recibido por una guardia de fieles amigos -Alfonso Queipo de Llano, Ángel Cañete y El Tiriri, a los que luego se une Fosforito-, de los que el guitarrista se siente orgulloso y a quienes dedica los más altos elogios que se pueden dedicar en el flamenco: «Son los mejores aficionados que conozco», afirma.



¿A qué se dedica ahora?

Artísticamente, a nada. Me llamaron hace poco para participar en unas jornadas en Madrid, pero dije que no, porque me canso. En mi casa es otra cosa, pero en el escenario es como si estuviera empezando.

El tablaíllo con los amigos... Eso sí que tiene arte.

Eso sí, cinco minutos, diez, pero una hora y media o más se ha acabado.

Y el flamenco, ¿cómo lo ve ahora, se ha pasado la moda de la fusión?

El flamenco puro está ahí y hay muchísima gente que va a verlo. No el flamenco-fusión, sino el flamenco-flamenco. Es un arte que ha evolucionado un montón, yo recuerdo que antes era algo de minorías, para meter mil personas en una plaza toros, tenían que ir diez o doce figuras máximas. Pero ahora lo hace uno solo.

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